Bienvenid@s a una nueva edición de Pataletas Docentes…hoy vengo calentito después de este último mes…así que no esperéis un post amable ni nada por el estilo.
No tengo el día, ni la semana ni el mes…la realidad manda y hay que retratarla tal y como viene…así que vamos a ello.
Ya sabéis que hablé en mis dos anteriores aportes de Pataletas Docentes de varios temas entre lo que decidí «disertar» sobre la responsabilidad entre profesorado y alumnado en la consecución de objetivos, trabajo de contenidos y un largo etcétera…no voy a volver a hablar de ello, dadle un ojo a esas dos «vomitonas» y luego ya si queréis volved a estos lares…
Vamos a empezar a rajar…pero con ganas…y para ello voy a describir cosas. Y una de ellas es que hay que admitir una «derrota» en el aspecto metodológico. Ya veréis que «derrota» tiene muchas acepciones…venga, empezamos.
1º: mi clase es absolutamente flipante en el aspecto humano. De verdad, son una clase que me fascina por la calidad humana que hay en muchísimos aspectos. No puedo describir en ocasiones la madurez para ciertos temas que son capaces de exhibir así como la «conciencia» de grupo que transmiten en las ocasiones más inesperadas. OJO: que no es el país de «Mi Pequeño Pony» (y que no se me enfaden los acérrimos seguidores de Pequeño Pony por favor) pero de verdad que el clima humano me sorprende día a día.
2º: es una clase complicada curricularmente por ser un aula multinivel en la que coexisten 4º, 5º y 6º de Primaria…y ya os podéis imaginar lo que significa a nivel curricular, organizativo y metodológico. Hay 3 dictámenes, dos informes, están en marcha varias valoraciones y el desarrollo curricular es el que es…y claro llego yo este curso y me meto en ello a saco. Imparto 6 áreas: Lengua Castellana, Sociales, Naturales, Inglés, Cultura Asturiana y Valores. Además imparto docencia de Inglés en un grupo multinivel de 1º-2º-3º y también en Ed.Infantil de 4 y 5 años. Sí, lo sé…os veo la cara…pero bueno, yo me lancé a la piscina porque ya sabéis que soy un poco «soldado de trinchera» y a colmillos y garras no me gana nadie…o al menos intento no perder muchas batallas. Imaginad también el tener libros de texto para cada área y curso…a la vez. Planteé un esquema en el que poder vertebrar esos contenidos de manera global para poder «asaltar» el temario de la manera más integradora posible con un enfoque de gran-grupo.
3º: mi principal objetivo era intentar que el trabajo y desarrollo del aprendizaje de los contenidos fuera lo más cohesivo posible para no desatender a ningún grupo pues me preocupaba que si me centraba en un solo grupo de los 3 presentes los otros se vieran afectados negativamente en la atención que les prestaría. Decidí que la «mejor» opción era el trabajo sobre «herramientas de aprendizaje», o sea: enseñar a usar el libro, apoyos de consulta, plantillas de análisis, diccionario (que finalmente no había suficientes), enseñanza entre iguales, trabajo en equipo y tantas cuantas estrategias fueran posibles para que el trabajo de contenidos pudiera hacerse al nivel de cada grupo en función de ese uso de herramientas…al ser interino y viendo el nivel de la clase prioricé ese objetivo considerando que, a corto y medio plazo, me ayudaría a «salvar» las lagunas y baches que había evidenciado en mi primer mes en las diferentes áreas. Quería dotarles de autonomía para poder atenderles lo mejor posible y así, dentro de mis posibilidades, poder avanzar sobre ese esqueleto. Creía que podría conseguirlo.
4º: Aposté por el proyecto #TheOrientExpressChronicles , del que ya os estoy hablando en otros posts, por creer que podría darme cobertura en varios aspectos curriculares y vertebrarlos de manera que pudieran ser presentados a través de un arco narrativo común que les diera un marco de referencia. En eso he tenido un éxito relativo…y relativo es ser generoso. He intentado hacerlo lo mejor posible pero…por cierto, se me olvidaba: tengo un equipo directivo cojonudo y unas compañeras de aula y de apoyo en PT y AL que son de lo mejor y bien merece resaltarlo, sin ell@s las cosas serían mucho más difíciles. El resto de mis compañer@s de claustro repartidos en las diferentes aulas de mi centro rural, aunque lejos de mi campo de batalla, también son de medalla.
No he podido…no he conseguido cumplir con ello y me he visto superado por la situación, la realidad de mi aula y mi realidad como docente que ha pasado de especialista a tutor con esa carga lectiva y en año de oposiciones. Además tengo otra dificultad añadida: me implico. Me importa que aprendan, no que hagan pruebas o tareas…joder, quiero que aprendan y que se den cuenta de las conexiones entre lo que hay en su aula y en sus áreas y para qué narices sirve fuera de ellas…si no no me sirve.
He hecho mil adaptaciones metodológicas, las pruebas y tareas que he propuesto/diseñado/planteado se basaban en varias fuentes tanto oficiales y formales como informales y fruto de la observación y registro durante las primeras 3 semanas. He implementado el uso de herramientas y estrategias en tantas cuantas pruebas hemos hecho, he dado tiempo incluso en 2 sesiones para realizarlas, el concepto «atención a la diversidad» creo que no puedo haberlo integrado más partiendo de la realidad de mi aula…y aún así he fracasado miserablemente.
No he podido conseguirlo…ha llegado un momento en el que, por muchas razones que no vienen al caso ahora mismo, me veo desbordado. Mi propia incapacidad de gestionar esta realidad me ha llevado a cometer errores y uno de ellos también ha sido confiar demasiado en una autonomía que veía que no tenían asumida y que me negué a aceptar…y no es la primera vez que me pasa. Como resultado el área de Sociales ha sufrido mi falta de gestión en cuanto al trabajo de contenidos y desarrollo del temario…el área de Naturales también pero menos, he podido salvar algo mejor ese bache…pero no me siento contento. Por esa falta de acción responsable mi clase ha «pagado» con la desatención de una serie de puntos que me hacen dudar de cuánto y cómo han integrado una serie de contenidos y conceptos…enseñar a pensar no es sencillo…ni rápido…me confié…y claro…ahora hay que pagar la factura.
Me veo en la situación de contener ciertas cosas para poder hacer un «control de daños» que, menos mal que es ahora, en estos inicios del curso es aplicable y puedo hacer que este dique se asiente y cree el «meandro» que necesito. Voy a tomar un control más directo sobre las tareas de esas dos áreas, Sociales y Naturales, para poder ejercer mejor mi acción docente sobre esos contenidos. No puedo ni debo asumir que están preparad@s para una autonomía del calibre que creía que podían asumir ya que la ralidad me dicta lo contrario…punto pelota. No hay otra…por mucho que yo quiera hacer una cosa en la que creo y he constatado que da buenos resultados y es útil…cuando no se puede no se puede.
¿Todo es una mierda?…bueno…no…en ámbito lingüístico pese a las lagunas, carencias y baches hay avances en una serie de aspectos que me parecen muy importantes pero no al nivel que podría esperar…simplemente hay y con ello ya me conformo…por el momento. El arco narrativo utilizado sí me está ofreciendo ciertas ventajas de peso en el trabajo de contenidos lingüísticos tanto en Castellano como en Inglés así que por ese lado voy a darme un pequeño descanso ante el inminente bombardeo que viene encima.
Y sí…hay esperanza…o al menos tengo que creer que la hay.
Por que la mierda de todo esto viene cuando le pones todas tus ganas a algo, intentas poner de tu parte en todo, implicas a tu clase, intentas darle una vuelta a una clase que tiene unas particularidades y una inercia muy concreta, con unos antecedentes singulares, con un entorno y un trasfondo concreto y…no consigues poner en marcha ciertas cosas que sabes que son vitales…
Cuando ves que tienes, sólo en el área de Inglés, 28 criterios de evaluación a los que atender…que cada criterio tiene entre 3 y 7 indicadores, que para cada criterio hay entre 3 y 4 herramientas destinadas y que tienes chorromil alumn@s a quienes evaluar…y te ves desbordado y totalmente perdido viendo lo que tienes delante de tus narices en el día a día. OJO: mi clase responde dentro de sus posiblidades y no os podéis imaginar lo orgulloso que estoy de ell@s cuando tengo que aprar la calse, hacer la «foto» de dónde están, porqué estamos trabajando de la manera que lo hacemos y con qué puñetero objetivo. Dan la talla…la menos en ese momento…no sé dar clase para que aprueben exámenes…joder, lo que quiero es que aprendan a pensar, a usar el libro como herramienta de consulta, a que las plantillas que les he diseñado y enseñado sean recursos a su servicio, que el trabajo de otr@s profes de los que aprendo y llevo a mi aula sus materiales les puedan ser significativos no sólo en este curso si no para un futuro cercano…y ahora añadidle el resto de asignaturas…
Pero tengo miedo compañer@s…tengo bastante miedo y se debe a la evaluación. Veo lo que viene y me acojona…no por mi trabajo, creo en él y está fundamentado no en mi santos Kinders y en el «olé tus c–jnes»…está basado en los contenidos, las competencias y en todo lo formal…y aún así estoy acojonado. Hoy lo hemos hablado en clase…veo lo que viene y lo paso mal. Soy un espejo de lo que saben y no saben…y madre mía…lo paso mal…porque evidenciar lagunas y baches tiene consecuencias…y vienen curvas y estamos en un seiscientos sin cadenas en una carretera de montaña, nevada, con viento y se avecina una nueva tormenta…
Sí, algun@s ya os podéis imaginar de lo que hablo y de qué subyace en todo esto…pero joder…no considero que sea un mal docente, me equivoco y lo asumo…ya lo sabéis…no me caracterizo por mi piedad…sonará muy heavy pero seguro que comprendéis esta metáfora: «¿daríais el carnet de conducir a alguien que no está preparado?»…efectivamente…las consecuencias serían graves no sólo para el conductor, también para quienes rodearan a ese vehículo…
Así me siento en ocasiones cuando veo «conductores» con carnets que me pregunto de dónde leche se han sacado…son la evidencia de un futuro accidente…y no quiero que nadie se mate. ¿Qué hago?…¿miro hacia otro lado ante la posible colisión? ¿Detengo al vehículo y a su conductor y les pongo otra vez en la autoescuela?…pues en esas estamos.
Entre mis fallos y lo que uno se encuentra en ciertos momentos de su vida docente la bofetada de la realidad es la que es da igual las ganas que tengas o lo mucho que creas en tu trabajo y tus chachimateriales megafrikis que son «alucinantes». Pamplinas. Paparruchas.
Ya lo decía aquel: «es el aula amigo»…no sé…de verdad que hoy no sé…intento hacerlo lo mejor posible y no sé si lo estoy consiguiendo.
Es que…joder…quiero que avancen pero siento que estoy peleando contra el Gran Cthulhu armado con un palillo y sin backup de hechizos, armas y el resto de miembros e integrantes de la F.A.R….y no quiero una victoria pírrica…
En fín…tenía que soltarlo porque en ocasiones compartir estas rajadas me alivia el alma y me ayudan a centrar la pinza entre tanta comida de olla que no sé si me lleva a algún lugar después de la cantidad de horas que le dedico fuera de clase. Y no son pocas, os lo aseguro. Quizá sigo siendo un utópico idealista…y repito: no es una cuestión de libros, juegos o la madre que los trajo…es una cuestión de abordar una realidad de la mejor manera posible o incluso de maneras en las que no crees porque sabes que la factura no te convence pagarla ni abordarla, una factura que requiera desatender o atender de una manera que no ves que cohesione al grupo si no que va a crear grupúsculos muy dirigidos y que espero dé su fruto de autonomía a lo largo de lo que queda de curso…pero ya se verá. Ojalá lo haga bien….
Así que bueno…espero que hayáis podido leer entre líneas después de toda esta rajada…simplemente ha sido un desahogo vital de un docente como vosotr@s que intenta hacerlo lo mejor posible pero que esta vez ha perdido la batalla…toca retirarse a los cuarteles de invierno, reorganizar las tropas, ordenar los suministros y plantear una nueva estrategia para no sufrir más bajas que las imprescindibles…porque siempre hay bajas…en esta «guerra» no se «salva» a nadie…cada un@ debe luchar sus batallas…sólo espero poder ser un buen Sargento en esta trincheras y llevar a mi pelotón hacia el objetivo dándoles el mejor equipo y herramientas para que nadie se quede atrás o muy atrás y que si hay amputaciones y heridas pueda llamar a los sanitarios en medio del fragor de la batalla y que puedan arreglarlo con un bonito muñón o una cicatriz lo más pequeña posible.
Si habéis leído hasta aquí gracias por tragaros todo esto…de verdad que os agradezco la taza de sopa caliente en el frío de esta trinchera…
Gracias.
Por cierto, este post está dedicado a Xarxatic, al que saludo y recomiendo leer por la radiografía que suele hacer de muchas cosas…soldado veterano de muchas trincheras…puedes compartir su visión del campo de batalla o no…pero lo que es es. Un abrazo compañero.